El Bayern de Múnich se ha convertido en los últimos años en padre de uno de los equipos históricos de la Bundesliga. Los bávaros se han acostumbrado a ganar a un Hamburgo que nunca ha bajado a Segunda División, pero que esta vez parece tenerlo más difícil que nunca.
Apenas habían pasado ocho minutos cuando Ribéry aprovechó un pésimo despeje para regatear a Mathenia y establecer el 1-0. No tardaron mucho más los locales en aumentar la diferencia, pues Lewandowski cabeceó a la red un gran centro desde la banda derecha de Kimmich.
Sólo se habían disputado 12 minutos y el Bayern ya ganaba cómodamente y apuntaba a la goleada. Todavía en la primera parte, el propio Lewandowski conseguiría el 3-0, esta vez tras exquisito pase de Alaba.
El paso por los vestuarios no frenó el hambre de los bávaros, que harían tres goles más e incluso se permitirían el lujo de fallar un penalti. Primero, Robben puso el cuarto y, ya en los últimos diez minutos, Ribéry certificaría su doblete antes del penalti fallado por Lewandowski.
El polaco, eso sí, quería su 'hat trick' y en el minuto 89 pudo certificarlo. Un gol que ya sólo le pone a uno de Leo Messi y Harry Kane y que le enchufa en la lucha por la 'Bota de Oro' mientras su equipo firma un nuevo día en la oficina.