El Barcelona forzó la máquina para que Yerry Mina llegara en el mercado de traspasos del pasado mes de enero. Eran meses en los que el conjunto azulgrana tenía urgencias en la posición y la llegada de un nuevo zaguero se antojaba indispensable.
Sin embargo, pasó el tiempo, Umtiti y Piqué se recuperaron y Vermaelen mantuvo su excelente nivel, por lo que la realidad en la segunda mitad distó mucho de lo que esperaba un Yerry Mina que se quedó casi inédito a las órdenes de Valverde.
De cara a la próxima campaña, la más que posible llegada de Arthur complicará aún más las cosas, pues se juntarán varios futbolistas con plaza de extracomunitario y el Barcelona estará obligado a buscar una solución.
Mientras que la opción más factible parecía la búsqueda de un pasaporte europeo para Coutinho a través de su mujer, tampoco parece descartable que Yerry Mina acabe dejando el Barça para ganar experiencia fuera.
La planta y la salida de balón del colombiano gustan mucho en la Ciudad Condal, pero al defensa le hacen falta bastantes minutos de juego para adaptarse a lo que es la exigencia de un club como el Fútbol Club Barcelona.