En la fecha límite para que las asociaciones miembro confirmen su interés en presentar ofertas para la fase final con las cuatro mejores selecciones, las federaciones italiana (FIGC), polaca (PZPN) y portuguesa (FPF) han presentado sus candidaturas.
Ahora la UEFA les proporcionará los requisitos que deben cumplir y tendrán hasta el 31 de agosto para presentar sus informes.
En principio, la fase final será organizada por uno de los ganadores de los grupos de la Liga A.
Como quiera que Italia, Polonia y Portugal están encuadradas en el Grupo A3, y siempre que las tres asociaciones presenten ofertas que cumplan los requisitos de la UEFA, el ganador de esa llave está en condiciones de ser elegido anfitrión por el Comité Ejecutivo de la UEFA en diciembre próximo.
La fase final será un torneo de cuatro equipos en el que participarán los ganadores de los grupos de la Liga A. Las semifinales se disputarán los días 5 y 6 de junio de 2019, con el partido por el tercer puesto y la final previstos para el 9 de junio del año que viene.
La fase final se disputará en dos estadios con una capacidad neta de al menos 30.000 espectadores, situados en la misma ciudad anfitriona o a unos 150 kilómetros de distancia. Las sedes se confirmarán con la presentación de los expedientes de licitación.
La selección española jugará contra las de Inglaterra y Croacia dentro de la primera fase, que se disputará entre los próximos meses de septiembre y noviembre.
España quedó encuadrada en el Grupo 4 de la denominada "Liga A", compuesta por cuatro grupos de tres selecciones, en los que figuran las equipos más potentes de Europa, que serán los que opten al título de esta nueva competición creada por la UEFA.
Las selecciones participantes en las otras tres ligas (B, C, D) pelearán por ascender a la liga precedente y por no perder la categoría.