El Girona volvió a llevarse un 'set' del Bernabéu como ya hiciera en el Camp Nou, pero el partido de Chamartín dejó varias notas positivas para los de Machín. Para empezar, volvió a encumbrar el trabajo del técnico con la pizarra, pues el Girona hizo sus tres tantos en acciones a balón parado, colocándose como el equipo que más tantos ha hecho esta campaña tanto en esta suerte.
Y buena parte de culpa, además de Pablo Machín, la tiene su segundo, un Jordi Guerrero que hablaba de lo poco que les gusta a los jugadores entrenar estas acciones justo antes del partido del Bernabéu. "Es algo cansado y que no gusta a los futbolistas, pero al final si tienes premio es más agradecido", apuntaba Guerrero en declaraciones recogidas por 'Mundo Deportivo'.
Un éxito que también es inherente a Àlex Granell, un futbolista forjado en las categorías inferiores del fútbol español y que por fin está recogiendo los frutos en Primera. Su zurda está siendo clave en el gran rendimiento del Girona y Granell ya ha dado siete asistencias esta temporada, permitiéndose el lujo de dar dos en los tres tantos anotados por el Girona en Chamartín.
El Girona manda en el balón parado y envía un mensaje tanto a Real Madrid como a Barcelona de lo que podrían conseguir si prestaran un poco más de atención a este tipo de acciones. Hasta ahora, seis goles de saque de esquina y ocho de golpe franco confirman a la que sigue siendo una de las revelaciones de la Liga como el rey de la estrategia.