Vallecanos y vascos llegaron ayer a Shanghái, tras un largo viaje de más de 12 horas (los primeros con escala en París, los segundos vía Frankfurt), se entrenaron en instalaciones de la ciudad oriental y se desplazarán a la vecina Nankín para disputar el amistoso, donde el calor y la humedad serán el mayor rival.
Desde la liga pasada las camisetas de los dos equipos lucen publicidad de la firma informática china Qbao.com, con sede precisamente en Nankín, lo que explica la presencia de ambas plantillas en esa ciudad a orillas del Yangtsé.
Los donostiarras, con muchas bajas tras una intensa pretemporada que les ha llevado a Austria o Escocia, han llevado a 19 jugadores, mientras que el Rayo de Paco Jémez contará con 22, aunque entre ellos no se encuentra el flamante fichaje de Zhang Chengdong, el primer jugador chino fichado por un equipo español de Primera.
Para el Rayo, el partido podría tener el atractivo añadido de servir de "vendetta" al encuentro de la última jornada de liga, disputado en mayo y en el que los de Jémez cayeron en casa ante los vascos por un abultado 2-4, aunque en ese partido ninguno de los dos clubes se jugaba nada.
El amistoso en China se enmarca dentro del LFP World Challenge, el programa iniciado por la liga española para extender sus valores de competición y deportividad a otros mercados.