En una entrevista concedida a 'RadioMitre'. el atacante confesó la dificultad de una infancia que bien le pudo hacer coger otros derroteros menos recomendables: "Yo también tuve la opción de agarrar la droga y el choreo".
"Pero opté por el camino del deporte. Mi vieja estaba internada en un hotel 12 horas para traer el pan a mi casa, yo no quería fallarle", relató Centurión antes de dedicarle unas palabras a su lugar de origen.
"Villa Luján es muy importante para mí, nunca me voy a olvidar de donde salí, pero yo ya no puedo ir más. Hay muchas cosas en el barrio que no se ven, es un hueco del que si no salís, te vas perdiendo. Es mi lugar en el mundo, pero ya no puedo ir ni a tomar mate", admitió abiertamente.
El delantero, que rechazó al Málaga en el último momento y mareó a Boca con su psobile regreso, ya está encontrando su sitio en Racing: "Quiero consolidarme como un volante con gol".
"No me arrepiento del pasado, pero me hubiese gustado mostrar otra imagen en mi vida personal. Capaz que mañana salgo de acá, tengo un accidente y dicen que estaba borracho o saliendo de un boliche. Lo que me pase a mí lo van agrandar siempre, por eso trato de evitar todo, soy un apuntado", añadió sobre su carácter y estilo de vida polémicos.