En octubre de 2016, Gerard Piqué sorprendía a todo el mundo anunciando que el Mundial de Rusia supondría su retirada de la Selección Española. Tras un partido en Albania, en el que fue criticado por cortar las mangas de su camiseta, el central dibujaba la fecha de caducidad a su periplo con España.
Sin embargo, el barcelonista dejó en el aire esta circunstancia en la rueda de prensa que conmemoró su renovación con el club azulgrana. Quizá por no ser el día apropiado, Piqué fue mucho menos tajante de lo que lo fue en Albania.
"Lo normal es que lo deje después del Mundial. Es un orgullo vestir la camiseta de la Selección Española, pero hay etapas en las que te tienes que centrar en otras cosas y hay que cerrarlas bien", señaló.
Lo que tiene claro Piqué es su objetivo: "Quiero irme dejando el pabellón alto". Al mismo tiempo, el defensor recordó lo que ha supuesto para él el combinado nacional. "La Selección me ha dado muchísimo y he tratado de devolverlo con trabajo, sacrificio y títulos. Lo normal es que lo deje", incidió.
Piqué estará en el Barcelona hasta 2022, aunque Bartomeu aseguró ante los medios que posiblemente no sea la última renovación del central, que vivió un día especial en el que no concretó al 100% la fecha de su retirada de la Selección Española.