Neymar, Cristiano y el nuevo Madrid de siempre

El sueño de Neymar ni es flor de un día para los blancos ni se le espera una pronta resolución, pese a que estemos ante el Florentino más cauto y 'low cost' de los últimos tiempos.

Sin embargo, la crisis actual que atraviesa el Real Madrid ha hecho tambalear lo que hasta hace pocas semanas eran cimientos sólidos y el brasileño podría ser el cemento sobre el que edificar un nuevo Madrid de grandes dimensiones.

Florentino se puso el verano de 2019 como fecha para intentar un fichaje en el que, en todo caso, respetarían al PSG y a sus dirigentes. Sólo actuarían si los franceses acceden a negociar o si, en cambio, se interesan en algún efectivo de la plantilla.

¿Es Cristiano la llave?

En esta parcela se encuentra Cristiano. El rendimiento del luso está dejando mucho que desear y la posible llegada de Neymar incluso podría acarrear una marcha de CR7, atajo para adelantar los planes un año. Y es que no es ningún secreto que el luso lleva tiempo como serio candidato a nuevo Príncipe del Parque parisino.

Sea como fuere, el Madrid ya piensa seriamente en volver a ser el Madrid de siempre. Y esta versión nueva y añeja al mismo tiempo daría comienzo con la llegada de una estrella de la talla del ex azulgrana.

Un nuevo Figo

Ya no sólo se tiene en cuenta lo deportivo. A la locura que provocaría el fichaje del ex de Santos en la afición hay que añadir la inmensa repercusión que tendría su llegada y, por ende, sus camisetas, productos y seguimiento a la entidad.

Pero en el Bernabéu no dan puntada sin hilo. Así, Florentino ya sabe lo que es hacer desesperar al Barça y nunca se puede descartar una segunda parte de la película. Figo abrió un sendero que podría volver a recorrer otro ex 'culé' aunque, en este caso, previa parada en Francia.

Pese a que esta operación es algo que aún se ve lejos, el Madrid es capaz de todo con tal de recuperar el mandato que esta campaña está perdiendo ante un impecable Barça. Y el fichaje del brasileño sería, de paso, un palo más que duro para el eterno rival.