Entiende el cuadro isleño que Gálvez en ningún momento cometió la infracción que refleja el colegiado del encuentro, el catalán Medié Jiménez, en el acta, donde asegura que Gálvez fue expulsado por "zancadillear a un adversario sin intención de disputar el balón, impidiendo una manifiesta ocasión de gol".
Las Palmas defiende que sí existe la intención por parte de su jugador de disputar el balón, lo que, reglamento en mano, merece como máximo el castigo de una tarjeta amarilla.
El conjunto amarillo se mide este sábado (13.00) al Deportivo en Riazor, un encuentro que puede ser clave para uno de los dos equipos al hallarse ambos en la zona de descenso.