Según publicó 'Marca', el Real Madrid, que continúa trabajando para terminar con el negocio de la reventa encuenbierta, anunciará en las próximas semanas el manual de seguridad para perseguir esta práctica.
Asimismo, desde el club insisten que ellos no persiguen a los que venden su abono en un partido puntual, si no que quieren erradicar el negocio de algunas empresas que se dedican a lucrarse con la reventa.
En la cúpula blanca subrayan que el abono es propiedad de la entidad, que cede su uso al socio en cuestión, pero no para una utilización que vaya en contra de los intereses del club.
En este sentido, la primera medida será la de articular la expulsión del club a todo aquel que incumpla la norma establecida para el uso del abono.
Desde la directiva blanca, tienen claro que no puede volverse a producir la imagen de la grada del Bernabéu llena de aficionados azulgranas, celebrando el gol de Messi en el pasado 'Clásico'.