El conjunto 'txuri urdin' quiere aprovechar la cita europea para empezar a asentar los pilares de su transformación. Una metaformosis que, sin embargo, no será nada fácil dada la dinámica del equipo.
La cita ante el Salzburgo es clave por varios motivos, entre ellos el futuro de Eusebio Sacristán en el banquillo. Y es que si el técnico no consigue resultados inmediatos, la directiva podría prescindir de él.
En estos momentos, la situación es de máxima presión. El vestuario recibirá en Anoeta al cuadro austriaco tocado por la última derrota ante el Real Madrid. No obstante, no es el único factor que ha mermado su autoestima y quebrado su juego: las rotaciones o la marcha de Íñigo Martínez al Athletic también han pasado factura al equipo.
La Real se la juega este jueves en un escenario difícil y para revertir la situación necesita tener claras cuáles son sus mejores argumentos, algo que parece estar lejos de producirse.