El delantero canario jugó la última media hora. Forzó un penalti en el minuto 89 y quiso tirarlo. Habría sido decisivo, pues podría haber significado el gol del triunfo. En ese momento el partido iba 1-1.
Jesé reclamó el penalti y se enfadó porque el lanzamiento le correspondía a Charlie Adam. Los compañeros trataron de calmarlo, pero apenas pudieron. Jesé sólo hacía gestos de enfado hacia el banquillo.
10 de febrero de 2018
Para colmo, Adam lo lanzó... y lo falló. La broma final es que pudo marcar tras el impacto del balón en el palo, pero llegó tarde al rebote. Al final, empate... y Jesé, enfadado.
El ex delantero del Madrid había sido noticia días atrás por problemas extradeportivos, la enfermedad de su pequeño y su relación sentimental. Regresó y no dejó a nadie indiferente.