En una rueda de prensa el presidente de la Confederación Asiática (AFC), el jeque Salman bin Ibrahim al Jalifa, dijo que "Irak hizo un gran esfuerzo para que se levante el veto" y precisó que éste es el momento para suspender dicha prohibición.
La FIFA debe decidir el próximo 16 de marzo si retira o no la sanción, impuesta desde los años 90 -aunque levantada por un corto periodo de tiempo en 2012- por la oleada de violencia que tuvo lugar en el territorio.
La institución deportiva sólo autoriza la disputa de partidos amistosos en los estadios de Basora, Erbil (Kurdistán iraquí) y Kerbala, pero no están permitidos los encuentros oficiales.
El amistoso se saldó con un 4-1 a favor de Irak y más de 65.000 espectadores asistieron al estadio de Basora, mientras que decenas de miles de hinchas no consiguieron entrar.
En la primera parte (m.21) Saeed Awadh Al Yami marcó en propia puerta el primer tanto para los iraquíes.
Emad Mohsin Majeed (m.47) y Muhanad Ali (51) ampliaron la renta hasta el 3-0. Acortó distancias Mukhtar Falatah en el 79, pero de nuevo Ali, en el 73, estableció el definitivo 4-1.
Este miércoles el ministro de Juventud y Deportes iraquí, Abdulhusein Abttan, calificó este partido como "un episodio importante" y "el último capítulo" que viene antes de la decisión de la FIFA para levantar o no el veto.