Gracias a la gran herramienta de 'big data' futbolístico, se puede encontrar un termómetro para medir interesantes parámetros. El precio de mercado es uno de ellos. Y en el podio, nada honorífico esta vez, figuran tres futbolistas de LaLiga.
El central del Atlético es el más señalado de todos. En 2015, su valor se cifraba en 52 millones, por los apenas 35 en que costaría ahora hacerse con él.
Paramétros muy lógicos en función de estadísticas individuales y méritos de equipo ordenan esta clasifación. En el caso del charrúa, se imponen su edad actual, 32 años, así como el desastre en Champions: de jugar dos finales consecutivas a quedar apeado en una fase de grupos bastante amable.
A Gareth Bale lo que más le penaliza es su calvario de lesiones. La falta de continuidad le ha lastrado, pese a haber vivido una etapa de gran bonanza con el Real Madrid.
Así que el galés ha pasado de estar cifrado en casi 51 millones a valer a día a de hoy casi 37. No es de extrañar que Florentino Pérez se lo quiera quitar de encima.
Luis Suárez, otro uruguayo, representa otro tipo de caída: tras varios años a un nivel brutal haciendo goles, este año se ha estabilizado en estadísticas menos extraterrestres. Si en 2015 valía 75 'kilos', ahora cuesta 61.
Tampoco se libra Messi
Aún quedan otros grandes que han sufrido ese azote. Como el propio Leo Messi, que es el cuarto en esa clasificación. Su valor de mercado es impresionante, 103 millones, pero es que hace tres campeonatos superaba los 117.
Más que hablar de un mal rendimiento, recuerda lo difícil que es mantener una continuidad en la excelencia.
También es lógico que los jugadores más top sean los que acusen más cualquier cambio de rendimiento. Este íncide flulctúa de manera muy similar a como lo hace el ranking ATP, en el que los jugadores van defendiendo o mejorando los méritos contraídos el año anterior.
Pogba (-13), Müller (-11) o Lewandowski (-10) igualmente han acusado caídas de valor dentro de los diez primeros. Cabe dejar claro que una cosa es ese valor de mercado de un futbolista en función de su rendimiento y otra bien distinta lo que se está pagando por ellos, más aún en el actual momento de inflación en Europa.
El caso más negativo
La peor de las curvas la representa Nani, futbolista de la Lazio. Ciertamente, desde que cambió el Manchester United empezó a vivir un declive que ha tenido continuidad en Italia. Ello se puede medir con un termómetro que le deja en muy mal lugar.
Es el único jugador entre los 15 primeros cuyo valor de mercado, 9.9, es menor que la cantidad de millones en que se ha devaluado (10).