El club de Mestalla se acerca al último cumpleaños antes de su centenario tras haberse impuesto por 0-2 ante el Sevilla, en un partido clave para sus aspiraciones de disputar la próxima Champions.
Con independencia del resultado de este sábado ante el Alavés, el conjunto valenciano está inmerso en una buena dinámica a nivel global y con muchas posibilidades de conseguir su objetivo de regresar a Europa.
Nada tiene que ver su actual panorama con los que había el 18 de marzo de hace dos años y del pasado, cuando el Valencia vivía momentos de turbulencia, con la vista puesta en la zona baja de la clasificación.
Hace dos años, la festividad llegó con el equipo situado en 12º posición y con tan sólo 34 puntos, 22 menos de los que tiene a día de hoy.
Además, en el encuentro inmediatamente al de su 97 cumpleaños había perdido como visitante en el derbi local ante el Levante (1-0) y le esperaba el 20 de marzo la visita del Celta a Mestalla, en la que el equipo gallego se impuso por 0-2.
Un año después, la situación todavía era peor, ya que el Valencia, 13º con 30 puntos, pasó la fiesta de cumpleaños amargado por un empate a uno en casa ante el Sporting de Gijón, un rival en zona de descenso que le creó muchos problemas en Mestalla.
Ahora, la situación está marcada por el optimismo, con un equipo consolidado en la zona alta de la tabla que, aunque no está al mismo nivel que mostró en octubre y noviembre, ha sido capaz de mostrar un estilo propio de la mano de su entrenador, Marcelino García Toral.