El Club Patronato de Paraná no sólo es noticia por mantenerse en Primera División con un plantel modesto, sino que también tiene una curiosidad en el plantel. Su arquero Sebastián Bértoli, quien tiene 40 años, le saca 5 años de diferencia a su técnico Juan Pablo Pumpido.
La cuestión no finaliza allí, puesto que ambos también son reconocidos en la Superliga Argentina por sus respectivas edades en relación al resto de los equipos. Mientras que el guardameta, nacido el 16 de octubre de 1977, es el jugador más longevo en participar de la Primera División Argentina, el técnico de la institución, nacido el 1 de diciembre de 1982, es el más joven de dicha competición.
Sebastián Bértoli ocupa el arco de Patronato desde el año 2003, habiendo hecho una larga carrera en el ascenso argentino desde su debut en 1996 en Universitario de Paraná. Su primer encuentro en la Primera División fue en 2015, cuando obtuvo el ascenso con su equipo. En la actualidad, es uno de los máximos ídolos de su club, además de desempeñar el cargo político de concejal en Paraná. Sin duda, es un referente de dicha ciudad y los hinchas no dejan de demostrarle afecto cada vez que salta al campo.
Por su parte, Juan Pablo Pumpido desarrolla la profesión desde los 21 años, después de abandonar la práctica como jugador un año atrás. Su amplio recorrido lo llevó a dirigir a Santa Fe en el Federal C, y a ser ayudante de campo de Roberto Trotta y de su padre Nery Pumpido, quien fue campeón del mundo con Argentina en 1986.
Debutó como técnico de Primera División en el año 2016, dirigiendo a Unión de Santa Fe, lugar que ocupó hasta comienzos de 2017, completando un total de 13 partidos en la dirección del equipo. A Patronato llegó en julio de 2017, reemplazando a Rubén Forestello.
Un dato poco usual en el mundo del fútbol, y con mayor rareza en el profesional, ya que los entrenadores suelen ser personas con experiencia y una edad más avanzada para llevar a cabo un oficio tan inestable y complicado.