Primero fue Toni Kroos, después cayó Marcelo en Sevilla y ahora le ha podido tocar a Modric. El croata, el eje sobre el que crece el fútbol del Madrid, acudió a realizarse pruebas médicas este miércoles y no participó en el entrenamiento.
Fue el último del que dispuso la plantilla de Zidane antes de encarar el encuentro aplazado ante el Leganés. La ausencia de Modric sorprendió a los periodistas que allí se dieron cita, pero todo tenía un motivo preocupante.
Y es que, según Miguel Ángel Díaz de 'COPE', el centrocampista se encontraba con los galenos del Madrid pasando diferentes chequeos médicos. Al parecer, Modric se lesionó en el entreno de este lunes, aunque el club no informó de ello.
Tuvo que ser Zidane, en su comparecencia de prensa, el que informara sobre el asunto. "Se ha resentido en el isquio. Es poca cosa pero como siempre tengo fe en toda la gente que trabaja aquí para que vuelva rápido", comentó el francés.
Huelga decir que el croata no estará en Butarque; aunque lo que realmente preocupa a Zidane y al madridismo es la vuelta de Champions en París, a la que el conjunto blanco parece que va a llegar con demasiadas piezas importantes entre algodones.
Con o sin Modric, el equipo encara un derbi madrileño con la intención de seguir creciendo en convicción y juego, aunque con el miedo de que esta racha de lesionados no cese.