Los seguidores del cuadro francés la emprendieron primero con un guardia ante la impotente mirada de sus compañeros y, posteriormente, agredieron al segundo en el cuello.
Según el citado medio, lo que en un principio se denominó "arma blanca u objeto punzante requisado por los agentes", resultó ser la hebilla de un cinturón.
Ya antes del encuentro, los primeros disturbios tuvieron lugar con la entrada al estadio de bengalas que, pese a los cacheos, fueron lanzadas desde la grada.
Esto sería un aviso de que se avecinaba otro triste capítulo con ultras visitantes en Bilbao en la Europa League, tras el trágico fallecimiento de un ertzaina el pasado mes de febrero.
15 de marzo de 2018