La última sesión del conjunto blanco antes de recibir al Leganés en la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey tuvo nombre propio: Sergio Ramos.
El camero se ejercitó a pleno rendimiento junto a sus compañeros, en un entrenamiento marcado también por el ojo morado de Cristiano Ronaldo.
Mientras la hinchazón perdura en la cara del portugués, Zidane respira aliviado al ver la recuperación de su capitán, confirmando en sala de prensa su disponibilidad frente al Leganés.
Aunque el objetivo de Sergio Ramos era llegar a Mestalla en buena forma, el técnico francés sopesa darle algunos minutos en Copa para recuperar ritmo de competición.
Además, la jornada previa a la visita del Leganés estuvo marcada por las ausencias ya conocidas por lesión de Vallejo y Ceballos.