El nivel de un campeonato se mide por los futbolístas que compiten en él. LaLiga cuenta con los dos mejores en la actualidad, pero la sensación más allá de Messi y Cristiano, es que cada año va perdiendo más potencial en cuanto a jugadores de primer nivel.
Quizás relacionado con ésto, se intuye una tendencia en el fútbol español en la que el jugador africano, que no hace muchas temporadas era protagonista, está perdiendo fuerza en los terrenos de juego de Primera División.
Tres africanos de 'Oro' en LaLiga
Entre las temporadas 2003 y 2007 jugaban en España tres de los mejores futbolístas africanos del momento. En aquellos años, el camerunés Samuel Eto'o era el gran dominador del fútbol africano.
Su primer Balón de Oro Africano le valió para firmar por el F.C. Barcelona, donde ganaría dos más de manera consecutiva. Dos años después del último Balón de Oro de Eto'o, fue Frederic Kanouté el que se alzó con el galardón.
El de Mali era el delantero titular del Sevilla que empezaba a forjarse un nombre entre los 'grandes' de España y Europa. Ese mismo año llegaba al Barcelona Yaya Touré. Con 24 años se hizo imprescindible en el esquema del Barça de leyenda de Guardiola.
Aunque no ganó el Balón de Oro africano en las filas del conjunto blaugrana, su proyección internacional le llevó a fichar por el City donde ganaría hasta cuatro galardones consecutivos, igualanda así al camerunés Eto'o, como el africano con más Balones de Oro.
Cada temporada menos y de menor nivel
LaLiga española es, de las cinco grandes de Europa, la segunda con menos futbolistas venidos del continente africano. Un total de 26 comenzaron la temporada, de los cuales hay que eliminar a Bakambu que se marchó a China en el mercado de invierno.
Este dato contrasta con los 117 que juegan en Francia, el campeonato predominante en cuanto a futbolistas africano. Pero también Italia, con 33, e Inglaterra, con 49, superan a la Liga española. Tan sólo la Bundesliga cuenta con menos, con un total de 23
Precisamente la marcha del delantero congoleño al fútbol chino, no hace más que ahondar en la 'crisis africana' en nuestro fútbol. Además del número de futbolistas, el nivel de los que juegan es cada vez más bajos.
Según datos de 'ProFootballDB', sólo Bakambu mostraba parámetros de rendimiento buenos, reflejados en un índice de 80 puntos, y tan sólo 5 de ellos superan los 70. Contrasta con la Ligue 1, donde hasta 17 jugadores están por encima de 70 puntos en cuanto a rendimiento.
Sorprende por ejemplo, que en la Serie A, a pesar de no contar con un gran número de africanos, sí cuentan con algunos de los que mejor rendimiento están ofrenciendo esta temporada como Koulibaly y Ghoulam (Nápoles) o Nkoulou (Torino).
Tomando los 10 africanos con mejor rendimiento en esta temporada en cada una de las cinco ligas, España sale mal parada en el quinto lugar. Además, no cuenta con ninguno de los cracks africanos del momento.
Thomas y Achraf: una moneda al aire
De los cuatro primeros clasificados de LaLiga, tan sólo Atlético y Real Madrid cuentan con algún africano en sus plantillas. Tanto Thomas como Achraf son muy jóvenes y cuentan con mucho margen de mejora, pero de momento no son protagonistas en sus equipos.
En el caso del centrocampista atlético, parece que esta temporada se va ganando, poco a poco, la confianza de Simeone. Cuenta en su haber con 4 tantos en los 26 partidos que ha disputado.
El lateral marroquí del real Madrid está viendo como su juego y su rendimiento se contagian del mal momento de su equipo. Comenzó con fuerza, pero a medida que avanza la temporada sus actuaciones van creando dudas.
Del resto de clubes españoles, destaca el Betis que cuenta con tres africanos rindiendo a buen nivel: Feddal, Mandi y Boudebouz, y el Leganés con dos veteranos marroquíes en su delantera: Amrabat y El Zhar.
Lo más preocupante no es el presente del fútbol africano en España, si no que nada hace pensar que, los Salah, Aubameyang o Mané, vayan a hacer las maletas para trasladarse a España. Sólo el prestigio y la historia de Real Madrid o Barça pueden competir con el dinero de la Premier.