Salvo sorpresa, Arthur será del Barcelona en los próximos días, aunque su incorporación podría demorarse aún unos meses. Y Philippe Coutinho ya es del equipo azulgrana desde el mes de enero.
Iniesta ya tiene recambios de futuro, y puede empezar a hacerse a un lado cuando el cuerpo se lo pida sin miedo a dejar huérfano al equipo.
No pocas veces se ha especulado con su marcha anticipada del Barcelona. A punto estuvo de marcharse el verano pasado, pero el Barça supo retenerle, y en seis meses encontrarle no uno, sino dos reemplazos.
Su último contrato le permite marcharse del Barça en cuanto quiera, no obstante. Quizá sea en julio, quizá en agosto, quizá nunca. Elija lo que elija hacer con su carrera Iniesta, el Barcelona estará preparado para lo que venga.
La dirección deportiva azulgrana, siempre tan cuestionada, ha acertado de lleno en esta ocasión. Queda ver qué tal se adaptan los dos brasileños al juego del Barça, y cómo de grande les queda el traje de director de orquesta que con tanto orgullo ha lucido Andrés Iniesta, y que seguirá luciendo hasta que el de Fuentealbilla diga 'basta'.