A diferencia de lo ocurrido con la sanción a Gerard Piqué, el organismo regulador ha perdonado la tarjeta amarilla que vio Luis Suárez en la pasada jornada 12.
"En las imágenes aportadas no se aprecia la acción descrita en el acta arbitral ('Impedir que el guardameta adversario lanzara el balón cuando lo tenía controlado en sus manos'), sino que es el guardameta del equipo adversario quien contacta con el jugador amonestado, tratando de apartarlo, y llevándose las manos a la cara sin motivo aparente. En este orden de cosas, procede dejar sin efectos disciplinarios la amonestación del referido jugador Don Luis Alberto Suárez Díaz", espetó el comunicado del Comité de Competición.