Tras la eliminación en la Liga de Campeones, la continuidad de Neymar se ha convertido en un asunto de estado para el PSG. Nunca mejor dicho, pues los dueños cataríes de la entidad ya han sacado músculo para hacer ver a su estrella que tras el Mundial deberá continuar en París.
La teoría que mantienen en el club, según desveló 'Mundo Deportivo', pasa por el Mundial. Están convencidos de que Brasil lo ganará, con Neymar como capitán, y entonces estará en primera plana del fútbol mundial. El PSG aprovecharía ese rebufo para ponerle sobre la mesa otro proyecto ganador y así empujarle a ganar, al fin, el Balón de Oro por delante de Cristiano Ronaldo y Messi.
Hamad Bin Khalifa Al-Thani, emir de Catar e hijo del fundador del fondo de inversión dueño de las acciones del PSG, quiere esa imagen del Neymar triunfador para que todo el mundo del fútbol mire hacia París.
No es una cuestión económica, sino política. Obviamente, vencer el Mundial da muchas papeletas para ser elegido mejor jugador del mundo, aunque no lo garantiza, todo queda supeditado a lo que ocurra en la Champions. Que se lo digan si no a Xavi o Iniesta tras la conquista de Sudáfrica.
La estrategia podría llevar cierto compromiso de facilitar, o al menos estudiar, un hipotético deseo de Neymar de abandonar Francia a partir de 2019.
En cualquier caso, si Nasser Al-Kheläifi se presentó en persona en Brasil para hablar con Neymar y su padre, fue porque todo un país está detrás de esta situación, que será el gran atractivo del próximo mercado.