32 equipos se enfrentan entre sí para llegar a los octavos de final. 32 entrenadores al frente de cada uno de ellos con un mismo objetivo: alzar el trofeo.
Sin embargo, es curioso... De todos ellos, sólo uno sabe lo que es llevarse una Europa League. Diego Pablo Simeone se llevó el título allá por el año 2012.
Ese mismo año, Simeone llegaba al Atlético de Madrid en una situación complicada. ¿Su objetivo? Devolver al conjunto rojiblanco al lugar que le correspondía. Y empezó por la Europa League.
Aquella temporada, el Atlético logró pasar de la Fase de Grupos. Junto a él estaban el Udinese, el Celtic y el Rennes.
En dieciseisavos, los rojiblancos tumbaron a la Lazio para plantarse en octavos. Allí les esperaba el Besiktas, al que también dejaron fuera de la competición.
En los cuartos de final, el Hannover. ¿Y en las semis? El Valencia. De ahí a la final... en la que tumbaron con contundencia al Athletic. Ese fue el largo camino que emprendió Simeone en su día para levantar la Europa League.
Este año, en dicha competición, hay grandes nombres de técnicos como Wenger, Sarri o Mancini, por citar algunos. Simeone quiere demostrar que tiene tomada la medida al título... Los demás, buscan su primera Europa League.