Mascherano apenas duró unos minutos sobre el terreno de juego. Hubo un choque cabeza con cabeza y se hizo una aparatosa brecha.
El argentino, sangrando y conmocionado, tuvo que ser atendido rápidamente por los médicos y retirado en camilla. Mascherano se fue al vestuario llorando.
Salió en su lugar André Gomes. No tiene suerte Mascherano en las finales de Copa. En la última ante el Sevilla, el 'Jefecito' vio la roja antes del descanso.
Llorente, por su parte, pudo seguir jugando después de que los médicos del Alavés le pusieran un aparotoso vendaje.
Terrible la escena del jefecito @Mascherano. Que todo salga bien #ViscaBarça pic.twitter.com/oxgjesoSW0
— Pedro Gutiérrez (@pedropanista) 27 de mayo de 2017