En La Paz, a más de 3.600 metros, Brasil jugó un partido sin trascendencia ante el conjunto boliviano. Un encuentro de dureza extrema por la altura que ya pasó factura a otras selecciones.
Por ello, los jugadores de Brasil necesitaron oxígeno tras el encuentro. Neymar, Alves, Paulinho, Miranda... todos estaban con sus bombonas de oxigeno y las máscaras puestas para recuperarse mejor tras el duro encuentro.
La selección de Brasil, después de jugar en La Paz, Bolivia, a 3.600 metros de altura... pic.twitter.com/MUMrvCfBhO
— Juez Central (@Juezcentral) 5 de octubre de 2017