El delantero paraguayo es consciente de que no está rindiendo al nivel esperado y que eso quizás pueda desesperar a la afición bética, que vio como su equipo se gastó 7 millones de euros en él.
"Sé que esperan mucho de mí, pero estoy tranquilo. Trato de hacerlo lo mejor posible y que los goles lleguen para sacar al equipo de la zona baja. Yo no tengo la culpa de que pagaran esa cantidad por mí", aseguró en declaraciones recogidas por 'AS'.
En cuanto a su nivel, reconoció que le importa lo colectivo pero que le preocupa un tanto lo personal: "Lo primero es el equipo, pero en lo individual me gustaría mejorar el registro. Soy autocrítico y los delanteros dependemos de los goles. Tengo mucho que mejorar, pero soy joven. Quiero ser el mismo el de la pasada temporada".
Por último, dejó ver que ha aceptado bien su suplencia: "¿Titularidad? El que decide es el entrenador y yo lo acepto. Estamos metidos en un proyecto. El objetivo es mejorar cada año para seguir creciendo. En este equipo, la actitud no se negocia".