Un despertar tardío en Mestalla

Los noventa minutos en Mestalla fueron un completo frenesí. El equipo de Eusebio Sacristán se adelantó en el primer minuto de juego gracias a un disparo de Juanmi que no llevaba peligro, pero Diego Alves acabó por meterlo en propia puerta al no cerrar un túnel en el que el Valencia perdió la visión.

El equipo 'che' aumentó las líneas y la presión para intentar pillar el rebufo de una Real Sociedad que se fue a por el partido sin pensarlo, ya que el Valencia andaba noqueado. Odriozola y Canales fueron los que estuvieron más cerca de hacer el segundo tanto de la noche, pero sus disparos salieron por ambos lados de la portería de Diego Alves.

Willian José fue el encargado de tranformar el penalti pitado debido a un codazo de Siqueira, que se llevó la tarjeta amarilla. Y así se fueron los protagonistas al descanso. La grada pitó a los de Voro, que marcharon cabizbajos.

Segunda parte con festival de goles

La Real Sociedad metió pólvora arriba con la entrada de jugadores como Oyarzabal, que fue el encargado de hacer tercero con un disparo inapelable al corazón de Diego Alves. Solo, tranquilo y para dentro. Pero el Valencia encontró agua gracias a un Nani enchufado. Suyo fue el gol de penalti que llenó de ilusión al valencianismo.

Zaza, en un centro de Cancelo, metió la puntera de la bota para congelar a una Real que empezó a sufrir hasta el final. Los de Voro lograron una resurrección en una segunda parte de color y sabor 'che'. Jugada tras jugada, los minutos pasaron pro delante de un Voro que tampoco encontró la solución.

La Real sintió el despertar del Valencia, pero el protagonista final del sueño que no se completó fue una Real que descansa en puestos de Europa.