Todo comenzó un 16 de octubre de 2009. El día 14, Ramsey había marcado su primer gol con Gales, y dos días después fallecía Andrés Montes, un popular comentarista deportivo de España.
Ramsey seguía marcando goles, y a alguien se le ocurrió fijarse en un detalle. Cada vez que marcaba, dos o tres días después, como mucho, un famoso era noticia por su muerte.
Así nació la 'maldición de Ramsey', pero no deja de ser una macabra casualidad. Porque todos los días muere gente, y porque no todos los goles de Ramsey han acabado con la vida de un famoso. De hecho, sólo en unos 20 se puede establecer una relación válida. Y lleva 63.
Los últimos que ha marcado han revivido esta 'maldición'. Las muertes de Nicky Hayden y Roger Moore ocurrieron dos y tres días después de que anotase al Everton.
Marcó de nuevo en la final de la FA Cup, y fallecieron Gregg Allman y Manuel Noriega. Este domingo ha vuelto a marcar, con gales, ante Serbia, y todos nos preguntamos a quién le tocará la pajita más corta en esta ocasión.
No será Adam West, pues el icónico 'Batman' de los años 60 falleció en la tarde del sábado.