Tiene por delante un Mundial, quedó encuadrado en el mismo grupo que su Portugal y una España que le trae bastantes recuerdos, pero a Queiroz hay algo que le perturba. El luso no cree que ni el gobierno ni la federación estén apoyando lo suficiente a sus jugadores.
"No me van a callar y quiero expresar mi opinión sobre lo que Irán necesita. Necesita una preparación especial para el Mundial, no me importan las amenazas y lo hacen para que me calle porque los jugadores y los fans merecen mejor apoyo", señaló.
El ex entrenador del Madrid prosiguió con sus argumentos: "Hay que poner en marcha un plan especial para que los jugadores estén preparados".
Esto puede provocar que Queiroz sea fulminado de su cargo, algo que no parece lo más importante para él: "Me pueden echar, pero no me importa porque seguiré mostrando mi opinión. Los aficionados y jugadores iraníes se merecen todo el apoyo para estar preparados para el Mundial".