Pese a lo contundente el resultado, el Köln ha realizado una protesta y ha pedido incluso la repetición del partido por considerar que el videoarbitraje se utilizó de manera indebida.
La piedra de la discordia fue una jugada en los instantes finales de la primera parte, cuando el partido estaba 1-0 y que se produjo tras un saque de esquina. En el área hubo un forcejeo entre Sokratis, central del Borussia, y el jugador del Köln Dominique Hentz quien tuvo al final un choque con su portero Timo Horn. Horn dejó caer la pelota al piso y Sokratis la empujó al fondo de la red.
El árbitro principal Patrick Ittrich anuló el gol del Sokratis pero luego, tras consultar la situación con el videoarbitraje, optó por validarlo.
El Köln alegó que un pitido del árbitro interrumpió el partido y, por ello, lo que ocurre después no puede ser rearbitrado.
"Soy un defensor del videoabitraje. Pero creo que el partido se decidió por un error del equipo de árbitros. Pido que nos atengamos al protocolo que determina con claridad cuándo puede intervenir el videoarbitraje y cuándo no", dijo el director administrativo del Köln, Jörg Schmädke.
Además, el tercer gol del Borussia, marcado por Pierre Emerick Aubameyang, fue producto de un penalti que también se sancionó tras la intervención del videoarbitraje.
El director administrativo del Borussia, Hans-Joachim Watzke, criticó las protestas del Köln. "Convendría que aprendieran a perder", dijo. La polémica sobre el partido de anoche no es la primera que surge en torno el videoarbitraje en las cuatro jornadas jugadas de la Bundesliga.