Las gradas de Montilivi estallaron de alegría cuando Stuani abrió el marcador en el minuto 22 de partido. Sólo 22 minutos en Primera necesitó el Girona para marcar su primer gol.
La alegría se duplicó cuando apenas tres minutos más tarde, el propio Stuani duplicaba la ventaja de los suyos con un segundo cabezazo. Y los 'olés' asaltaron las gradas desde entonces.
Montilivi se estrenó a lo grande en Primera. Tres minutos mágicos que toda la afición del Girona guardará en sus retinas.