En un mensaje publicado en su cuenta oficial de una red social, el jugador madrileño, que acaba la cesión en el club vitoriano, hace balance de la temporada, que "a falta del Europeo sub-21, ha sido muy especial" para él, "un año inolvidable".
Llorente recuerda que el pasado verano decidió ir cedido al Alavés. "Era una buena oportunidad de jugar en Primera, en un club con tradición y con un proyecto ilusionante. Hoy, casi diez meses después, puedo decir que la decisión que tomé fue la acertada", asegura.
El internacional español cree que ha "madurado como persona y como profesional este año", ha "crecido en muchos aspectos" y ha "aprendido una barbaridad". "Entre otras muchas cosas, he aprendido que la fuerza del grupo puede con todo y te lleva a disfrutar el camino, acercándote a metas que, a veces, crees inalcanzables", afirma.
"Tanto he aprendido y tanto he disfrutado que tengo mucho que agradecer. Gracias a mis compañeros y al cuerpo técnico. Todos vosotros me habéis enseñado y de todos me llevo algo. Hemos compartido una temporada extraordinaria y llena de grandes momentos", apunta Llorente, quien también agradece al club la confianza que depositó en él y por darle esta oportunidad que no olvidará nunca.
También agradece a todos los que le ayudaron en la ciudad y a la afición. "Esa que nunca nos ha fallado, que siempre ha estado ahí, animándonos, llevándonos a esa novena posición y a esa gran final. Espero que seáis conscientes de lo fundamental que ha sido vuestro apoyo para que el Alavés haya logrado cumplir con creces los objetivos", apostilló.
"Triste por no haber podido daros esa Copa que tanto merecíais, pero satisfecho porque lo intentamos hasta el final y porque el equipo se ha dejado el alma durante toda la temporada, y sobre todo en ese partido", comenta.
"No sé si existen los finales felices pero, de ser así, deben de ser parecidos al de este año, que me hace sentir afortunado y orgulloso de haber formado parte de la historia de este gran club. ¡Aúpa Alavés!", concluye el escrito de Llorente.