Javier Mascherano ha sido uno de los grandes perjudicados por la llegada de Ernesto Valverde al Barcelona. El argentino, que ya empezó a merodear el banquillo con frecuencia durante la 2015-16 con Luis Enrique, se ha visto totalmente desplazado por la confirmación de Umtiti y el gran rendimiento de Piqué.
A sus 33 años, el polivalente defensor apenas ha jugado 10 partidos esta temporada con el Barcelona y es el duodécimo en minutos de juego, claramente por detrás de unos Umtiti y Piqué que le llevan 600 y 300 minutos de ventaja.
El 'Jefecito' sólo ha participado en aisladas rotaciones de Valverde o cuando el técnico azulgrana ha decidido dar algo de refresco a la pareja de centrales o a algún centrocampista en esta primera fase de la temporada, con muy poca participación como titular.
Por ello, en su concentración con Argentina, reconoció que está analizando su situación. "Uno quiere jugar más, pero no digo que lo merezca. Los titulares son jugadores de primerísimo nivel y no sé que va a pasar. Yo estoy analizando la situación constantemente y no descarto nada", avisó Mascherano para 'TyC Sports'.
"Hoy en día no tengo pensado volver a Argentina, pero tampoco he tenido propuestas", añadió, confirmando que aún no tiene previsto dejar el fútbol europeo y posponiendo su casi seguro regreso a River hasta más adelante en el tiempo.
"No descarto nada; no quiero ser preso de mis palabras. Buscaré mi felicidad", sentenció el jugador del Barcelona, abriendo la puerta a una salida del Barcelona que ya estuvo cerca de producirse en las últimas dos campañas en dirección a Turín.