El jugador no pudo completar la última sesión de entrenamiento a causa de una elongación en el semimembranoso del muslo derecho, una lesión muscular que le tendrá de baja un total de dos semanas.
De igual manera, esta lesión no es un varapalo para el Barcelona, pues el jugador no tenía la opción de jugar la final de Copa a causa de su expulsión en la vuelta de la semifinal en el Camp Nou.
Así, Luis Suárez ha dado por finalizada su temporada. El uruguayo termina el año con un total de 37 goles en los 51 partidos que ha disputado. Ya sólo le queda pensar en la próxima campaña.