Son malos tiempos en Las Palmas. El conjunto amarillo no levanta cabeza y sigue sin salir de puestos de descenso. La situación es límite y eso lo sabe la afición y la entidad.
Pako Ayestarán llegó como relevo de Manolo Márquez y desde que se instaló en el banquillo canario sólo conoce la derrota: seis partidos disputados, seis tropiezos.
Un racha negativa que ha hecho que el Consejo de Administración se reuniera de última hora para tratar de solucionar el problema tras la derrota ante el Levante.
Cuando todo parecía encaminado a la destitución, tal y como apuntaron algunos medios, la cúpula directiva de Las Palmas acordó que Ayestarán seguirá como técnico para el partido ante la Real.