Las claves del Betis que viene

Los planes de la entidad verdiblanca pasan por incrementar los ingresos por los abonos y las entradas de los nueve millones de euros de la temporada pasada a 15 millones que esperan ingresar al término de la presente, un incremento del 50%, según relató Alarcón en una entrevista a 'EFE'.

Este incremento se basa en los ingresos generados de forma directa e indirecta por la nueva grada y el incremento de abonados, que en esta temporada han superado los 50.000, detalló Alarcón, que participó esta semana en el foro de la industria del deporte 'World Football Summit' que tuvo lugar en Madrid.

"Ese dinero es el que debe financiar la obra del estadio", apuntó el responsable de Negocio del Betis, que apuesta por entender el campo de juego como "un ente vivo" en el que "siempre hay que invertir".

Ramón Alarcón explicó que la entidad prevé amortizar en cuatro o cinco años el desembolso efectuado en la reforma de la nueva grada de Gol Sur, construida durante la temporada pasada por un importe de unos 15 millones y que incrementa el aforo de la zona de 5.000 a 15.000, para dejar la capacidad total del Villamarín en 60.720 espectadores.

"Nuestra idea era amortizarlo inicialmente en siete años, por los incrementos de ingresos estamos en cinco años y esperamos acortarlo para que en cuatro años hayamos pagado las obras del Gol Sur", explicó.

La nueva grada no solo genera ingresos de manera directa a través de las entradas, sino que también ofrece ingresos indirectos, relacionados con los pagos por derechos de televisión, que dependen del número de entradas vendidas, o por el crecimiento de los patrocinios con la nueva imagen del estadio.

"Con las reformas y la nueva identidad cromática, el estadio del Betis es mucho más atractivo para los patrocinadores. En los patrocinios hemos crecido mucho esta temporada, en torno al 40%, y es porque realmente el campo del Betis es más atractivo", aseguró Alarcón.

El ejecutivo verdiblanco enfatizó que cambiar la imagen de un estadio no es solo un aspecto de diseño, sino que es capital para generar ingresos para el club.

"Por eso desde el área de Negocio entendíamos esta obra como una inversión y no como un gasto", apuntó.

Por otra parte, uno de sus principales objetivos a corto plazo era incrementar el número de abonos en la campaña de esta temporada, que se ha saldado con más de 50.000, un número "récord en la historia", según Alarcón.

"Ahora el siguiente reto que la asistencia media se eleve, hemos pasado de los 32.000 espectadores del año pasado a los casi 47.000 de este año", añadió.

Con más espectadores y más ingresos por entradas, abonos y televisión, el próximo objetivo del Área de Negocios del Betis es transformar el Benito Villamarín en un estadio conectado, para lo cual están trabajando en un acuerdo con la empresa tecnológica Aruba, propiedad de la estadounidense HP.

"Un estadio conectado te permite en un partido comprar una localidad superior por 10 euros desde el móvil; pedir la bebida desde el asiento, o pedirla a restaurantes o cafeterías con una cola rápida; acceder a promociones de 'merchandising' durante el partido, o tener las repeticiones de las jugadas en el móvil durante el partido desde siete puntos de vista distintos", explicó.

Para recibir estos servicios, el Villamarín tendría que estar equipado con una tecnología que tiene "un coste elevado", por lo que el Betis está elaborando con Aruba un modelo de negocio en el que ambas compañías compartan ingresos y puedan pagar así la inversión necesaria.

El horizonte temporal para que el Villamarín sea un estadio conectado sería de dos o tres años, aunque Alarcón advirtió que en los último ejercicios están "corriendo por delante de los plazos" porque la generación de recursos evoluciona bien.

"Hay que firmar el acuerdo, desarrollar la infraestructura y las aplicaciones que te permiten utilizarla. Un horizonte muy optimista sería la temporada que viene, lo más normal dentro de dos años", añadió.

Para todos estos proyectos hay algo esencial: que el balón entre en la portería contraria. El proyecto de esta temporada, encabezado por el entrenador Quique Setién, ocupa el noveno lugar en ocho jornadas con 13 puntos, cuatro victorias, un empate y tres derrotas.

"Creo que este proyecto es una evolución. El año pasado teníamos el decimotercer presupuesto de Primera, este año se ha renovado el equipo, y prácticamente casi todos los jugadores que hemos vendido han generado plusvalía en el club, por lo que yo quiero romper una lanza por el anterior director deportivo", apuntó Ramón Alarcón, en referencia al trabajo de Miguel Montes Torrecilla.

Con los recursos generados dentro y fuera del campo, el director de Negocio del Betis calcula que estarán entre el octavo y el noveno presupuesto de LaLiga Santander.

"Hemos puesto todo el dinero en el campo, con una dirección deportiva muy profesional y hay un equipo que está ilusionando, jugando un fútbol vistoso. La filosofía del entrenador coincide con la filosofía de la afición, y hay una gran comunión", apuntó.

No obstante, el directivo bético quiso poner un punto de cautela en cuanto a las aspiraciones del equipo.

"El año pasado cometimos quizás un error, que yo asumo como responsable de Negocio, que si no quedamos entre los diez primeros devolvemos el diez por ciento de los abonos. Era por marcarnos un objetivo, igual que todas las empresas lo hacen. La marcha deportiva del equipo no fue la esperada, y eso supuso un lastre para el club", reconoció.

Como vacuna, el Betis se pone como objetivo de la temporada "el siguiente partido". "La línea tiene que ser partido a partido, trabajo, esfuerzo y seguir todos trabajando en la misma dirección. En mayo veremos dónde estamos y por qué objetivos podemos pelear", finalizó el director del Área de Negocios del Betis.