El ariete francés, que llegó al Emirates procedente del Lyon este mismo verano, aseguró en una entrevista reciente que recoge 'Marca' que su madre le prohibió ser portero, su posición favorita en el campo, por tener miedo.
"Me gustaba jugar de guardameta cuando era joven, era lo que más me gustaba, pero a mi madre no le había tanta gracia porque pensaba que jugar bajo palos podía ser demasiado peligroso", declaró el galo.
Además, insistió, asegurando que la opinión de su madre se convirtió en una exigencia: "Dijo que, o jugaba de delantero, o nada". Además, reveló una curiosa anécdota de su infancia: "Cada vez que perdíamos me ponía muy triste y lloraba, pero no os preocupéis, ahora he cambiado".