El Hannover 96 está siendo la principal revelación de la Bundesliga. El equipo de André Breitenreiter es quinto en la tabla, ocupando plaza de Europa League. Incluso venció a todo un Borussia Dortmund y al Schalke 04, y puso contra las cuerdas a muchos equipos imponentes.
Pero ese asedio no siempre tuvo buen final. Contra el RB Leipzig volvió a demostrarse que el Hannover anda carente de suerte, pues no logra resistir en los últimos minutos y cede un punto o tres. "No destroces en 5 minutos lo que has hecho en 85", decían.
No le vendría mal al Hannover aplicarse ese lema. En la quinta jornada, empezó la demostración de la mala suerte rote. En el minuto 83, Petersen empató el gol inicial de Harnik. El Friburgo logró empatar en casa ante el Hannover.
En la séptima y octava jornada, los descuentos fueron traicioneros para 'die roten'. Primero contra el 'Gladbach, con el gol de Hazard que puso el 2-1. Después, ante el Eintracht, que se llevó la victoria del HDI Arena gracias al tanto de Rebic.
Y, cuando en Hannover parecían haber olvidado su mala fortuna, llegó el RB Leipzig de Timo Werner. El codiciado delantero germano culminó la remontada de los ‘toros rojos’ en el 85’, volviendo a dejar a los de Breitenreiter con la miel en los labios.
Las consecuencias de estos goles tardíos son demoledoras. Cinco puntos perdidos que le situarían en la tabla colíder. Si el Hannover hubiera permanecido imbatido a partir del minuto 80 en los cuatro partidos, tendría 23 puntos, dos por delante de RB Leipzig, Borussia Dortmund y Schalke.
No obstante, no le servirían para dar pelea al Bayern que, tras ganar al Borussia, se distancia en la tabla como si fuera una tradición que los bávaros empezasen pronto a despegarse de sus competidores en la carrera por la Bundesliga.
Queda constatada la mala fortuna que tiene el Hannover 96 en los minutos finales, los cuales les ha costado cinco puntos que ahora mismo le darían la opción a 'die roten' de luchar por las posiciones de Champions.