José 'Pibe' González era uno de los tres suplentes de Panamá que se encontraban calentando en la banda del Rommel Fernández. Cuando vio que el balón se salió por la banda, a unos metros de él, no lo dudó.
Se pegó un sprint como no ha pegado en su carrera en el terreno de juego, metió cuerpo al futbolista costarricense y le pegó una patada al balón que lo mandó, literalmente, casi fuera del estadio.
El público panameño le jaleó, aunque la acción fuese antideportiva como pocas. Desplazó, por decirlo suavemente, el balón de forma deliberada, cuando éste no estaba en juego y no siendo uno de los jugadores con permiso para tocarlo.
La acción le costó la amonestación, pero él encantado. Entre el tiempo que se perdió en sacarle la amarilla y en buscar el balón (no deben andar sobrados de balones en la Federación Panameña) se perdieron unos segundos que no se recuperaron.
Al final, Panamá resistió, ganó 2-1, y logró una plaza histórica en el Mundial de Rusia.
La carrera que pegó el suplente de Panamá para botar el balón no la pega ni de titular. pic.twitter.com/NnI89mJc29
— Fútbol (@JHFutbol) 11 de octubre de 2017