Carlos Tévez ha conocido en sus carnes el efecto gaseosa del fútbol chino. Fichado como estrella absoluta por el Shanghai Shenhua, el argentino se ha dado cuenta de que el proyecto del balompié asiático está todavía en pañales.
"Creo que ni de aquí a 50 años el fútbol chino podrá competir con el europeo", aseguró categóricamente el delantero, encontrando el motivo en el crecimiento futbolístico de los más pequeños.
"En Sudamérica y en Europa los jugadores empiezan a aprender a jugar al fútbol desde niños, en China no sucede así. Técnicamente no son buenos y el fútbol es diferente", concluyó.