Andrés Iniesta evitó la polémica. El capitán azulgrana se desmarcó, junto con otros presentes como Carles Puyol, de las fotografías y las redes sociales consciente de la polémica que podían suscitar.
Y no le faltaba razón. La imagen de Neymar, Messi y Suaréz, así como la de Piqué y el 'crack' brasileño, ha dado la vuelta al mundo causando un auténtico revuelo en el seno del conjunto azulgrana.
Tanto es así, que la propia directiva del Barcelona se ha enfadado con unas imágenes que han sepultado el anuncio de la denuncia que interpondrá el club a Neymar tras su marcha.
#ChiringuitoBarcelona
— Paulo henrique (@reis3991) 22 de agosto de 2017
Iniesta estaba en la fiesta pic.twitter.com/wDIiYQXEgt