En más de 10 años de carrera, y tras haber pasado por el Celtic de Marsella y por dos de los clubes franceses más grandes (Saint-Etienne y París Saint-Germain), y pese a haber sido casi 60 veces internacional con la Selección de Francia, la zaguera sólo había conquistado un título: la Copa de Francia en 2010. Pero el pasado mes de mayo, las cosas cambiaron drásticamente.
Esta temporada ha inscrito su nombre en el palmarés de la Primera División Francesa, la Liga de Campeones y, de nuevo, la Copa de Francia. "Cuando fiché por el Olympique de Lyon el verano anterior, el objetivo era ganar títulos. Hemos ganado tres. Por tanto, se ha cumplido con creces", explicó. Aunque asegura que no se arrepiente de la decisión de dejar París, reconoce también que fue duro.
"Ganar títulos no era el objetivo número uno; eso vino luego. Mi carrera, básicamente, ha sido una progresión. Tras el Marsella y el Saint-Etienne, el PSG me permitió hacer del fútbol mi profesión e incorporarme a la selección de Francia. El Lyon y el verdadero hambre de títulos vinieron después" aclara la jugadora francesa sobre su etapa en París y el cambio de aires posterior.
Convencida de que los títulos no hacen a las grandes jugadoras, tiene como referente al ex futbolista italiano de la Roma Francesco Totti. "Los trofeos están bien, y ahora ya sé algo del tema, pero sentirse bien en un club es otra cosa. Es una forma de realización profesional diferente. ¡Mira a Francesco Totti!" explica Houara.
El objetivo de las francesas, en principio, es superar el tope en competiciones internacionles que tienen ahora mismo en cuartos de final. A partir de ahí se permitirán soñar con algo más. La última participación en una competición internacional del combinado francés se saldó con la eliminación en cuartos de final en los Juegos Olímpicos de Rio, y en aquel momento, el que por entonces era seleccionador Philippe Bergeroo, apuntaba a un problema mental.
Houara está de acuerdo con la reflexión del ex seleccionador: "Comparto su opinión en parte. Hay que reconocer que, en cuanto recibíamos un gol, éramos incapaces de volver a meternos en el partido, y ni siquiera de empatar. Tenemos talento, de eso no cabe duda. Ahora bien, para el alto nivel, con eso no es suficiente. Hay una dimensión mental importante. Pero estamos trabajando muchísimo en ese aspecto, además del trabajo táctico y técnico" comenta la internacional.
Este trabajo empieza ya a dar frutos reflejados en los partidos amistosos preparatorios para la Eurocopa, en los cuales las francesas han conseguido remontar, y dar a la vuelta a marcadores adversos. La Selección Francesa debutará ante Islandia en el segundo partido del grupo C.