El encuentro se disputará el 3 de junio en Cardiff y la entidad instalará pantallas gigantes para los aficionados blancos.
El Madrid ya ha sorteado las entradas para la final y ha señalado que, como pasó con Lisboa y Milán, abrirá el Bernabéu ese día.
Una manera más asequible de vivir toda una final de Champions para aquellos que no han podido lograr entrada o costearse el viaje.