Alli y Kane destrozaron en dos minutos al Arsenal de Wenger, gracias a la presión que los locales ejercieron sobre el equipo rival en la segunda parte del encuentro.
Alli, el más listo de la clase, abrió el marcador en el minuto 56 con un buen remate para empujar el esférico y perforar sin problemas la portería del Arsenal, en un rechace que cazó casi al vuelo.
Y, si había alguna señal de una posible remontada visitante, los locales se encargaron de anularla encontrando el segundo y definitivo tanto de la victoria en la jugada siguiente.
A Gabriel se le cruzaron los cables y le pegó una patada como una casa a Kane en el tobillo. No había nada que protestar y el colegiado indicó la pena máxima.
El propio Kane se encargó de anotar desde los once metros, para hacer totalmente de su equipo lo que restaba de partido.
Cech evitó la goleada
El guardameta del Arsenal se enfundó la capa de héroe para evitar que su equipo cayera por goleada en el White Hart Lane.
Hasta cinco paradones firmó un Cech imperial que fue la pesadilla de los delaneros del Tottenham, pese a ir por delante en el marcador.
Tras esta nueva victoria, el Tottenham se mantiene segundo con 77 puntos, a cuatro del líder Chelsea, que muy mal lo tiene que hacer para no alzarse con el título de la Premier.
Por su parte, el Arsenal se descuelga de la lucha por un puesto europeo, en una sexta plaza insuficiente para poder disfrutar la próxima temporada de alguna de las competiciones de las estrellas.