Koubek saltó a la fama por su lamentable actitud en un partido de la pasada temporada de la Liga Checa, cuando él y su compañero Lukas Vacha, indignados por el arbitraje, la tomaron con la linier.
Ni cortos ni perezosos, no tuvieron mejor ocurrencia que decirle que "las mujeres deben estar en la cocina", una actitud más que reprochable y que su club castigó de forma original, haciéndoles entrenar al equipo femenino.
Koubek llegó al gran club de la capital checa hace dos años, procedente del Hradec Králové, sólo para ser cedido al Slovan de Liberec.
Y cuando terminó su cesión, le llegó la hora de brillar. Se convirtió en el portero titular del Sparta de Praga, disputando 23 partidos de los 30 de la Liga Checa. Y a partir de ahora jugará en el Rennes francés.
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— Stade Rennais F.C. (@staderennais) 28 de agosto de 2017
Le gardien international tchèque Tomáš Koubek, 25 ans, s'est engagé pour 4 ans.
Bienvenue Tomáš ! https://t.co/KG1fL26ptv pic.twitter.com/4c9xcXBNPJ