Según ha informado el departamento de Seguridad del Gobierno Vasco, tras producirse el suceso, una patrulla de la policía vasca contactó con el agresor y con al agredido, quien no ha presentado denuncia.
El radical del Betis se encaró con el hombre que estaba sentado en el bar, llegando a golpearle en varias ocasiones, a la vez que profería insultos de contenido fascista.
Después de que el agredido no haya presentado denuncia por el suceso, la Ertzaintza ha dado por cerrado el caso, ya que por una agresión de este tipo no se realizan detenciones.