Al culebrón Verratti parece que se le ha abierto un pequeño atajo por el que dar carpetazo al problema y que el italiano cierre su fichaje por el Barcelona.
El PSG considera fundamental reforzarse para la próxima temporada tras el fracaso del primer proyecto de Emery al frente del club parisino. Los nombres que se han vinculado a la entidad francesa obligarán a realizar un desembolso económico e importante, y es ahí donde quiere incidir el Barcelona.
El club azulgrana está dispuesto a pagar los casi 100 millones que reclaman por Verratti, pero quieren cerrar la operación cuanto antes y esperan que el PSG no alargue una operación en la que el jugador ya ha dejado clara su intención de marcharse al Barcelona.
Aunque los franceses no lo tienen tan claro, y pretenden fichar sin deshacerse de Verratti, la amenaza del 'fair play financiero' le limitaría bastante los movimientos. De ahí que la opción de aceptar la oferta del Barcelona empiece a ser tenida en cuenta en las oficinas del club parisino.