El futuro de Timo Werner apunta a ser extraordinario. No obstante, a sus 21 años, ya sabe lo que es anotar 21 goles en la Bundesliga. Sin olvidar, por otro lado, que ya es uno de los habituales en las listas de Low. Una carrera que se está forjando pese al odio que el fútbol alemán le tiene.
De hecho, a Werner le pitan e insultan en cada campo alemán. Incluso con la Selección ha tenido que escuchar algún improperio. ¿El motivo? Protagonizar un 'piscinazo' ante el Schalke 04 que en Alemania se tomó, como ocurre con todos, como un acto antideportivo y nada limpio.
Pero la llama de Werner no se ha apagado a pesar de los silbidos. El jugador ha ido creciendo y creciendo, llamando a las puertas de varios grandes de Europa. Eso sí, de momento el Red Bull Leipzig -que tiene el dinero como castigo-, no ha querido ceder a un traspaso.
A pesar de esa reticencia del club alemán a vender a una de sus estrellas, el Madrid ha enviado a ojeadores en las últimas semanas a espiarle, tal y como avanzó 'Jugones', señalando también que el club blanco estaría pensando en ofrecer el año que viene alrededor de 50 millones de euros.