En la temporada 2014-15, el Madrid fue llevado en volandas por Ancelotti. Había conseguido ganar la Champions League en Lisboa y la Copa del Rey con la recordada galopada de Gareth Bale.
Sin embargo, el conjunto blanco comenzó la temporada escaso de efectivos de primer nivel. Perdió la Supercopa ante el Atlético de Madrid y llegó al final de la temporada con signos de cansacio.
Este año, Zidane ha demostrado que la plantilla es amplia y que hay un plan 'A' y 'B'. Por ello, la afición madridista confía en que, a la segunda, su club conseguirá el 'sextete' y hará historia ganando tres Champions consecutivas.
La plantilla, que ha ofrecido multitud de variantes al técnico galo durante el curso recién finalizado, quiere más. El reto de igualar la famosa hazaña del Barça ya se encuentra en la mente de todo el madridismo. Razones, desde luego, hay para el optimismo, aunque será un camino arduo y largo.